En la Biblia, no hay textos que hablan de los valores, en este sentido que venimos desarrollando; pero los valores son inherentes a Dios, son propios de su naturaleza y es por eso que podemos ver valores en todo lo que hizo. Veamos en la Creación:
- Bondad. “todo lo que había hecho... era bueno en gran manera” Gén. 1:31.
- Originalidad. “produzcan... según su género... según su especie” Gén. 1:24.
- Orden. “fue la tarde y la mañana” Gén.1 cuando termina cada obra según el día.
Y en la mayor creación de Dios, el ser humano:
- Lo dotó de belleza, libertad, responsabilidad: “lo hiciste un poco menor que los ángeles, le coronaste de gloria y de honra, y le pusiste sobre las obras de tus manos; todo lo sujetaste bajo sus pies” Heb.2:7-8.
También vemos los valores de aquellos que hombres, cuyas acciones quedaronen el texto bíblico como ejemplo para nosotros:
- La lealtad de José (no cedió ante las presiones).
- La fidelidad de Daniel (no dudó en mantener sus costumbres basadas en sus creencias).
- El liderazgo de Moisés (debió conducir un pueblo “duro de cerviz”).
- La sabiduría de Salomón (tenía la respuesta adecuada para cada problema).
En la ley de Dios, los 10 mandamientos también se rescatan los valores de
respeto al prójimo y a nosotros mismos. Si bien están expresando con negaciones, cada uno de ellos marca un valor, por ejemplo, si digo
- si digo “no robar”, pienso en la honradez,
- si digo “no mentir”, pienso en la veracidad,
- si digo “no codiciar” pienso el respeto por el otro.
Columnista: Profesora Laura Gómez Rusca